lunes, 7 de mayo de 2012


Que me lleves la contraria, que no me des la razón y opines, quiero que nos piquemos y luego reconciliarnos como tú y yo sabemos, quiero que en vez de regalos me hagas sentir que estás ahí, que sigues ahí, y que estarás ahí, quiero que me digas que me quieres, que me quieres ahora, en este mismo instante, y que no te importa lo que pase en un futuro, y que me digas te quiero sin decir nada, quiero que me tires al suelo y que seas tú quien me levante, quiero que me demuestres que estoy por encima de todo, nada de palabras, eso no sirve de nada si no se demuestran, y quiero que tú lo estés haciendo todos los días. Y sí, soy exigente, una niña mimada, caprichosa, egocéntrica, una niña de papá, y una enana que pone caras de asco, pero pese a todos de mis defectos que no son pocos, te aseguro, que nada puede hacer que te deje de querer, y por supuesto, que nadie, va a quererte ni la mitad de lo que te quiero yo.


1 comentario:

  1. y tal vez esa sea la verdad más grande jamas dicha!

    saludos de la chica de los chicles(:
    http://sonrisasfragilesdecristal.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar